Conoce al matón
Contenido
- Lecturas esenciales sobre intimidación
- El acoso laboral es una obra de teatro: conoce a los 6 personajes
Kevin estaba en su habitación "relajándose" cuando escuchó a su padre cerrar la puerta y empezar a gritarle a su madre. Kevin subió el volumen de su música para ahogar las maldiciones, los golpes y los gritos que inevitablemente le provocaban lágrimas. Noche tras noche y día tras día, esta era la rutina en la casa de Kevin. Si tenía suerte, escaparía de la ira de su padre. Ahora que Kevin tenía 16 años, su tolerancia por el comportamiento de su padre se estaba agotando. A los 6'1 sabía que fácilmente podía ponerlo en su lugar. Su padre lo había acosado toda su vida y, según su padre, Kevin era "un pedazo de mierda bueno para nada". La vida social de Kevin: Kevin tenía un deseo de poder, respeto y control (todas las cosas que le faltaban en casa). Nadie volvería a atropellarlo jamás. En la escuela y en la comunidad, Kevin se había ganado una gran reputación. Nadie quería meterse con Kevin o ponerse de su lado malo. No tenía respeto por las chicas. Hacía comentarios sexuales y perversos a las mujeres, haciéndolas sentir incómodas en su presencia. Para los chicos, los intimidaba, se burlaba y los amenazaba hasta que temblaban ante la mera visión de él. Kevin había intimidado a los niños toda su vida. No tenía verdaderos amigos. Nadie podía soportarlo y, peor aún, no podía soportarlo a sí mismo. ¿Cuántos matones hay como Kevin? Según un nuevo estudio realizado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades y el Departamento de Salud Pública de Massachusetts, la respuesta puede ser más de lo que cree. El estudio muestra que los estudiantes que son tanto víctimas como agresores tienen más probabilidades de haber experimentado violencia en el hogar. Los acosadores tenían cuatro veces más probabilidades de haber sido lastimados por alguien de sus familias que los estudiantes que no eran ni acosadores ni víctimas de acoso escolar. La intimidación es un gran problema y se ha asociado con muchos problemas psicológicos, algunos de los cuales se extienden hasta la edad adulta. La investigación sobre el acoso se ha correlacionado con: Colectivamente, ¿qué podemos hacer para detener este círculo vicioso antes de que cause más devastación? 1. ¡Padres, involúcrese! Padres, ustedes juegan un papel clave en si su hijo se convierte o no en un acosador. Una encuesta realizada con jóvenes de 10 a 17 años sugiere que los niños son más propensos a intimidar a otros si sienten que sus padres están enojados con ellos con frecuencia o si sienten que son una molestia para sus padres. Los padres que tienen una buena relación y hablan abiertamente con sus hijos crían hijos que son menos propensos a intimidar a los demás. ¿Por qué? Los adolescentes necesitan orientación y apoyo positivos de un adulto, además de que su opinión es importante para su adolescente. La investigación continúa apoyando la idea de que, aunque los padres pueden pensar que su hijo adolescente no mira ni escucha, sí lo hace. Por lo tanto, haga tiempo en su horario para pasarlo con su hijo adolescente. Además, controle lo que hace su hijo adolescente en línea. Los acosadores pueden volverse despiadados si están protegidos por una pantalla. Padres, ustedes juegan un papel vital en la campaña para detener el acoso. Nota: Si usted es padre y tiene dificultades con su relación con su hijo adolescente, busque ayuda. Los años de la adolescencia son años cortos y cruciales. Si las relaciones se destruyen durante este período de desarrollo, puede tener un impacto adverso en su futura relación con su hijo. 2. ¡Educadores, involúcrate! Es hora de que las escuelas adopten una postura activa para detener el acoso escolar. Si bien gran parte de las redes sociales negativas y los mensajes de texto ocurren después del horario escolar, sus consecuencias con frecuencia se infiltran en la escuela. Muchos niños quedan traumatizados cuando ingresan a la escuela al día siguiente y no saben qué se está contando sobre ellos. Los educadores deben reconocer que si la intimidación afecta el entorno académico de alguna manera, entonces es un problema escolar. Me gusta particularmente cómo el estado de New Hampshire apoya su ley anti-bullying que permite que los distritos escolares intervengan "si la conducta interfiere con las oportunidades educativas de un alumno o interrumpe sustancialmente las operaciones ordenadas de la escuela o actividad o evento patrocinado por la escuela". Las escuelas se dedican a educar. Si bien lo académico es importante, también lo son las habilidades sociales y emocionales. Es nuestro papel, como educadores, enseñar a nuestros jóvenes a ser comunicadores efectivos y prepararlos para una vida exitosa más allá de los muros de la escuela. Aqui hay algunas sugerencias: 3. ¡Adolescentes, involúcrate! Adolescentes, tienen la voz más fuerte entre sus compañeros. Conviértase en defensores vocales para detener el acoso. Aqui hay algunas sugerencias: Conclusión: Se dice que "se necesita una aldea para criar a un niño". Esta declaración es tan cierta que cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de detener este comportamiento, ya sea que usted sea una mujer de negocios, legisladora, educadora, madre, miembro del clero, adolescente, estudiante universitario, profesional médico, cosmetólogo, lo que sea ... todos desempeñar un papel para detener la intimidación. Lecturas esenciales sobre intimidación
El acoso laboral es una obra de teatro: conoce a los 6 personajes