Edema cerebral: tipos, síntomas, causas y tratamiento
Contenido
- Este accidente cerebral aparece cuando un líquido llena partes del cerebro en las que hay más.
- Definición del concepto de edema
- Edema cerebral: síntomas principales
- Tipos de edema cerebral
- 1. Edema citotóxico
- 2. Edema vasogénico
- 3. Edema hidrocefálico o intersticial
- Posibles Causas
- 1. Lesión en la cabeza
- 2 tiempos
- 3. Infecciones virales o bacterianas
- 4. Tumores
- 5. Hipoxia derivada de la altitud
- 6. Hiponatremia
- 7. Intoxicación
- Tratamiento
Este accidente cerebral aparece cuando un líquido llena partes del cerebro en las que hay más.
Si alguien nos dice que tiene retención de líquidos, probablemente estemos pensando en una persona con las piernas inflamadas e hinchadas o alguna parte del cuerpo. Dicho de esta forma, puede parecer algo irrelevante, fácilmente tratable y que difícilmente puede ser una molestia, como de hecho lo es en muchos casos. Sin embargo, esta retención de líquidos o edema puede ser muy peligrosa dependiendo de dónde ocurra. Porque no es lo mismo tener retención de líquidos en piernas o tobillos que tenerla en órganos como el pulmón.
Una de las situaciones más graves y peligrosas que se pueden producir al respecto es la presencia de edema cerebral, que incluso puede ser la causa de la muerte.
Definición del concepto de edema
Antes de hablar del edema cerebral en sí, es necesario comprender primero a qué nos referimos cuando hablamos del término edema. Se entiende como tal la existencia de hinchazón o inflamación de los tejidos blandos debido a la acumulación de líquido en o entre sus células, debido a desequilibrios en la cantidad de líquido intersticial que sale o ingresa a las células.
Esta inflamación puede tener una amplia variedad de causas y se puede encontrar en casi todos los tipos de tejidos blandos del cuerpo, pudiendo tener repercusiones de diferentes consideraciones según el tipo de tejido afectado.
Edema cerebral: síntomas principales
Uno de los lugares donde puede ocurrir el edema, así como uno de los más peligrosos, es el tejido cerebral. En el edema cerebral, encontramos un aumento y acumulación de líquido entre las células cerebrales. que genera una inflamación de magnitud suficiente para provocar síntomas clínicos.
Esta inflamación es tan grave en este caso porque el cerebro no flota en el vacío, pero está rodeado por una estructura ósea que lo protege pero a su vez lo limita: el cráneo. La acumulación de líquido puede provocar una compresión de la masa cerebral contra las paredes del cerebro, lo que puede provocar que las neuronas acaben muriendo.
Asimismo, aumenta en gran medida el nivel de presión intracraneal al no mantener el equilibrio electrolítico habitual, que también puede alterar y provocar la degeneración celular. Por último, la compresión puede afectar a los vasos sanguíneos, impidiendo que el oxígeno llegue a algunas de las regiones del cerebro y acaba por ahogarse.
Dependiendo de las regiones cerebrales comprimidas, los síntomas pueden variar mucho. Generalmente, aparecen mareos, fatiga y debilidad, así como una posible alteración del nivel de conciencia, dolores de cabeza, síntomas gastrointestinales como náuseas y / o vómitos o alteraciones de la percepción. La respiración puede acelerarse e incluso pueden aparecer convulsiones.
Relacionado con alteraciones en la conciencia, en casos severos, el paciente puede estar en coma o incluso la muerte si se comprimen los núcleos encargados de mantener el ritmo cardíaco y respiratorio. En algunos casos, puede provocar una herniación del cerebro o la pérdida permanente de funciones relevantes.
Además de estos síntomas, la presencia de edema cerebral puede provocar la muerte o la aparición de algún tipo de discapacidad física, mental o sensorial, que puede alterar en gran medida el funcionamiento normal de la persona, ya sea de forma temporal o permanente.
Tipos de edema cerebral
No existe un solo tipo de edema cerebral, pero podemos encontrar diferentes tipos en función de dónde y por qué se produce el desequilibrio y acumulación de líquido. Y es que el líquido puede acumularse tanto dentro de las células como en el espacio extracelular.
1. Edema citotóxico
En este tipo de edema, la hinchazón se produce cuando el líquido se acumula dentro de las propias células, haber capturado de forma anormal una cantidad excesiva de líquido intersticial. Generalmente se produce por un mal funcionamiento de las bombas de sodio / potasio y de los canales a través de los cuales el líquido entra y sale de las células. Nos enfrentamos a un problema de regulación del metabolismo celular y mantenimiento de la homeostasis. El consumo de algún elemento tóxico puede ser una de sus causas.
2. Edema vasogénico
El edema que se produce como resultado de una mayor permeabilidad del sistema nervioso, debido a la ruptura de la barrera hematoencefálica, se considera como tal. Generalmente encontramos que el plasma sanguíneo penetra en el parénquima o espacio extracelular que rodea las células nerviosas y se acumula en él. Es el tipo más común de edema cerebral. Los tumores, los accidentes cerebrovasculares y las lesiones en la cabeza suelen ser algunas de sus causas más comunes.
3. Edema hidrocefálico o intersticial
Edema generado por la obstrucción de los canales por los que circula el líquido cefalorraquídeo, provocando la inflamación de los ventrículos cerebrales o las zonas cercanas a la zona bloqueada. Aparece en hidrocefalia.
Posibles Causas
Existe una gran cantidad de posibles causas de la existencia de edema cerebral. Algunas de las más frecuentes son las siguientes.
1. Lesión en la cabeza
Una de las causas que pueden ser más fáciles de identificar es la que tiene que ver con la existencia de un traumatismo en la cabeza. Este golpe provoca que se produzca la rotura de los vasos sanguíneos., inundando el cerebro con sangre. Al intentar absorber el exceso de líquido, las células se inflamarían.
2 tiempos
La existencia de una hemorragia cerebral o bloqueo del sistema cerebrovascular es una de las causas más conocidas de edema cerebral. Y es que estos accidentes generarían o que los fluidos se extravasaran directamente dentro del cerebro o que las células nerviosas morirían y se romperían provocando una acumulación de fluido.
3. Infecciones virales o bacterianas
Otra posible causa de edema cerebral se puede encontrar en la existencia de una infección. Las células se dañan y se rompen, sus restos generan un desequilibrio en el nivel de líquido cerebral. Dentro de este grupo de causas encontramos enfermedades muy distintas, desde la meningitis hasta el síndrome de Reye.
4. Tumores
La aparición de neoplasias, sean benignas o malignas, puede provocar la compresión de los vasos sanguíneos o bloquear el paso del líquido cefalorraquídeo, lo que puede provocar la aparición de acumulación de líquido en algunas zonas del cerebro.
5. Hipoxia derivada de la altitud
Este tipo de edema se presenta en sujetos como escaladores y buceadores. La principal causa es la existencia de una variación repentina de la presión atmosférica ante un rápido aumento : en ausencia de oxígeno el cuerpo intenta dilatar las arterias y venas del sistema nervioso, pero si esta situación se prolonga o el cambio se genera muy rápidamente dicha dilatación generará dificultades homeostáticas que culminarán en la acumulación de fluidos en el cerebro .
6. Hiponatremia
Trastorno que se produce en ausencia de un nivel suficiente de sodio en sangre, que el cuerpo intenta compensar provocando un aumento en la entrada de líquido a las células.
7. Intoxicación
El consumo de un veneno o envenenamiento. Puede generar alteraciones en el sistema nervioso que provoquen la existencia de desequilibrios en los niveles de líquido intra o extracelular.
Tratamiento
El tratamiento del edema cerebral es fundamental y requiere una rápida actuación profesional para evitar la muerte o la aparición de daños irreparables en el paciente.
El primer paso que se debe realizar es la eliminación de la acumulación de líquido y la reducción de la inflamación, siendo fundamental vigilar los signos vitales en todo momento. Pueden ser necesarios mecanismos de respiración artificial para mantener un flujo de oxígeno constante y suficiente.
En los casos en que la vida del paciente está en peligro, la cirugía se suele utilizar de inmediato para controlar el nivel de inflamación mediante el drenaje del líquido o la resección de parte del cráneo para aliviar y reducir la presión intracraneal. Una vez estabilizado el paciente, es necesario analizar qué ha generado el problema para poder tratar sus causas.
Asimismo, se ha comprobado que la inducción de hiperventilación controlada reduce la formación de edema cerebral. Sin embargo, hay que estar muy controlado, ya que dependiendo de cuánto y durante cuánto tiempo se realice, puede tener efectos muy nocivos.
Tanto en este como en otros casos en los que no se utiliza la cirugía, es habitual el uso de diferentes fármacos. Por ejemplo, la aplicación de corticosteroides es muy frecuente en con el fin de reducir el nivel de presión intracraneal en aquellos casos en los que el problema no sea de origen citotóxico o hemorrágico. También se pueden utilizar osmóticos y diuréticos para facilitar la expulsión de líquidos.